, ,

Política y criterios

Colombia se distancia de los principios básicos de los países no alineados y también del concepto de seguridad integral entre los países de Unasur y Celac, al firmar el acuerdo sobre cooperación y seguridad de información con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan).

En Venezuela vienen sucediendo eventos que tienen indudablemente un carácter desestabilizador propio de las recetas de las agencias de inteligencia de las grandes potencias, verbigracia Estados Unidos y Europa.

Hemos advertido que en Venezuela se aplican dosis de anticomunismo, se siembra desesperanza entre la población, y en especial entre los jóvenes. Nos venden el modelo capitalista occidental como la maravilla, así la pobreza sea lo que crezca en el mundo norte en este momento.

Los medios de comunicación son viabilizadores de esta conjura silenciosa de las grandes burguesías globales cuyo ejército es la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). La enseñanza que podemos extraer de estos tiempos es que hay que amarrarse como Ulises para no escuchar cantos de sirena. La CIA, la inteligencia alemana, la inteligencia inglesa, la inteligencia francesa, todas, toditas, están en el plan de desestabilización contra Venezuela. Vean los diarios en letra chiquita.

Todo lo que tiene marca oficial en Venezuela es blanco de descalificaciones. Y a veces se recurre a viejas formulaciones. Sin caer en el pecado anecdótico, recuerdo que muy muchacho, a fines del gobierno de Rafael Caldera, escuchaba entre los adecos: “Al doctor Caldera le preguntaron por el alto costo de la vida, y el respondió: A mí no me parece, porque esta mañana Alicia me compró dos corbatas”.

El rumor también es parte de la guerra contra Venezuela. Militantes de ultraderecha se disfrazan de pobres y van a los barrios o a la puerta de un mercado a quejarse. Otras veces la crítica es abierta: En Televen, televisora aparentemente asociada a los dueños de clínicas, se insiste en las descalificaciones de los jóvenes que estudian medicina comunitaria. En los setenta era diaria la descalificación de quienes se graduaban en la Universidad Santa María. Qué balurdo es el sempiterno presidente del Colegio Médico, el adeco León Natera.

Claro, cualquier perrorabioso, como el cabeza pelá que dirige la MUD, o alguien de una ONG financiada por Washington, puede decir que hablamos de fantasmas. Sigan creyendo que se volverán creyones.

Este 2014 que va a terminar pronto hubo algo bien terrenal que la MUD ni se dio por enterada, y que debería, sino alarmar, por lo menos poner en guardia a cualquier bolivariano. Colombia es atlanticista. Sí. El pasado 12 de agosto ocurrió en Colombia un evento muy interesante, aunque reprochable y lamentable; pareciera que en Venezuela no nos hemos enterado. El congreso colombiano aprobó el acuerdo de Cooperación entre Colombia y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Fueron 81 votos a favor y 9 en contra, fundamentalmente del Polo Democrático Alternativo (PDA).

El lunes 8 de septiembre fue publicado en Gaceta Oficial de Colombia el acuerdo sobre cooperación y seguridad de información. Lo suscriben Juan Carlos Pinzón Bueno, Ministro de Defensa Nacional de Colombia, y por la OTAN, el muñequito de torta danesa Anders Fogh Rasmussen, entonces Secretario General del principal instrumento de guerra del anglosionismo internacional. El presidente Juan Manuel Santos lo firmó para su ejecútese.
Con esta acción Colombia se distancia de los principios básicos de los Países No Alineados, de cuyo movimiento forma parte, y también del concepto de seguridad integral entre los países de Unasur y Celac. Dí tú, como dicen en oriente.
A la prensa como El Nacional no le conviene hablar de estos asuntos. Miguel Enrique Otero sólo tiene interés en acabar con el sistema político imperante en Venezuela. El mismo lo dice, como lo afirma Capriles y la ultraderecha en general. En fin, todos ellos celebrarían si Venezuela toma el sendero bogotano de servir a la hegemonía guerrerista de la OTAN.

GUERRA ECONÓMICA

Sería bueno que se tomen medidas ante la guerra económica. Cuestión de criterios. Por ejemplo, adoptar un plan especial con países amigos, para no permitir que Venezuela sea bloqueda por las aerolíneas internacionales este fin de año. Que se firme de urgencia algún acuerdo con empresas de países amigos y aguarle la fiesta a los que hacen guerra económica en este campo. Ahí están Rusia, los países del Medio Oriente, China, todos con aerolíneas para adoptar alguna medida alterna que acabe la sequía de pasajes.
Lo mismo que con el dólar y la tramoya del “dólar Cúcuta” o dólar paralelo. A Colombia ni agua mientras no elimine el festín cucuteño del dólar paralelo. Quieres remesas, tratos preferenciales en el comercio, bueno quita el dólar paralelo cucuteño. A mediano plazo Venezuela tiene que fortalecer el bolívar. Evaluar si se incrementa su respaldo con petróleo, oro y diamantes. Tenemos una gran base de recursos, pero una ultraderecha vende patria que hay que combatir sin tregua.

CUENTOS ANTICOMUNISTAS (I)

Por los años setenta Valeriano Umpiérrez entrevistó a Gustavo Machado, presidente del Partido Comunista. No era corriente ver a Machado en televisión, y menos en Venevisión, donde estaban los batisteros. Muy elegante, con traje y una cobata de lacitos, Machado afirmó que contra el comunismo habían muchas leyendas negras (me gustaría hablar de leyendas rubias). Umpiérrez también le preguntó quién era el más grande anticomunista de Venezuela. “Hay muchos”, dijo Machado. Sin embargo, señaló: ¡El más grande anticomunista de Venezuela, sin duda, es Germán Borregales! Sobre Borregales puede decirse que su anticomunismo era algo ingenuo, también con dosis enfermizas. “Germán salvará a Venezuela”, era su consigna en las elecciones presidenciales a las que disciplinadamente acudía como candidato cada 5 años. No se podía decir que era un agente de la CIA. Los de ahora sí.