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ANÁLISIS: Latinoamérica se estanca

El Banco Mundial prevé que el crecimiento en los países de Latinoamérica será de apenas 0,5 por ciento


 

Augusto Figueroa

Empeora la crisis económica en América Latina. La región está al borde del abismo con crecimiento cero. Tal situación podría generar protestas masivas en aquellos países más gravemente afectados. Los que han pasado ya la raya roja y ya sus economías el crecimiento se ha contraído. Es el caso de Venezuela que en los dos últimos años la contracción ya roza el diez por ciento (exactamente menos del 9,5 por ciento). Estas cifras son las que maneja el Banco Mundial en la corrección de sus previsiones sobre la región para este año 2015, en las que nuestro país sigue ocupando el nada honroso lugar de la peor economía de la región con la más alta inflación del mundo, que expertos venezolanos creen llegará a tres cifras que para fin de año y podría ubicarse en más del 150 por ciento.

Respecto al conjunto de países latinoamericanos el ente financiero ubica el crecimiento apenas en 0,5 por ciento, lo que indica una disminución de cuatro décimas en relación con sus análisis de 2014 en la que había previsto un 0,9 por ciento. En la práctica se trata del estancamiento que podría generar mayores protestas sociales por la escasez de alimentos, medicamentos, colapso de servicios públicos (salud, educación, transporte), caída del poder adquisitivo de los salarios, desempleo, inestabilidad social y política, mayor déficit fiscal, cierre de empresas y ausencia de los inversionistas por la falta de credibilidad en los países receptores.

Esta semana en Ecuador estallaron protestas de miles de personas en varias ciudades del país por las medidas del gobierno del presidente Rafael Correa; los aumentos de impuestos afectarán especialmente a los trabajadores y a la clase media. Este último sector llega según los sindicatos y gremios profesionales a los cinco millones de habitantes. Los impuestos generarían al gobierno $ 2.800 millones. Estos se refieren a repuestos y autopartes para vehículos y medios de transporte. También para las importaciones de artefactos para el hogar y entre 45 y 50 por ciento de productos de consumo que no se producen en el país.

El descontento y la indignación de los ecuatorianos los mantuvo tres días de esta semana en la calle. Correa despacha el asunto como siempre lo hacen los regímenes autoritarios: “Lo que hay es una conspiración”. Nada de diálogo ni negociación con los afectados. Sin embargo el mandatario habló mucho de democracia, participación, soberanía y derechos humanos en la cumbre de Unión Europea y Comunidad de Estados de Latino América y del Caribe (Celac) concluida el jueves en Bruselas.

Correa como contribución a la austeridad y la igualdad social que pregona se rebajó el sueldo de $ 6.957 a 6.261 ¡Cuanta generosidad!

Como se ha convertido en una práctica de presidentes en apuros financieros Correa voló a Pekín en busca de créditos. Le habrían concedido $ 7500 millones. Pero la plata llega por cuenta gotas. El presidente ecuatoriano formado como economista en universidades estadounidenses funge entre sus socios de la ALBA como gran planificador. Pero elaboró un presupuesto para este año calculando el precio del petróleo en $ 80 el barril. Ahora paga las consecuencias de su imprevisión. Topa ahora con la protesta social que proclaman su rechazo a lo que denominan venezolanización ¡Ecuador no es Venezuela! dicen los carteles. Aunque la mayoría de los venezolanos también rechazan el modelo económico impuesto por el gobierno de Maduro. Ha sufrido las consecuencias de este plan que ahora, pese a la dolarización, lo ecuatorianos comienzan a padecer: el temor a la alta inflación, desempleo, inseguridad y corrupción.

A propósito de los créditos chinos debemos señalar que el país asiático actúa sobre seguro no son préstamos generosos y hay que pagarlos. El reciente viaje del primer ministro Li Kekuang aseguró una inversión en los próximos diez años de $ 250.000 millones pero eso es sobre la base de planes concretos y garantías suficientes. China empieza a contar sus reales y ha disminuido fuertemente sus compras de materias primas a la región. Esto es parte de la contracción de nuestras economías. Pero solo en parte. Los vicios de los gobiernos de nuestros países se manifiestan groseramente en ofertas desproporcionadas que generalmente no se cumplen pero están dirigidas a ganar elecciones y después de montarse en el poder crean un aparato de manipulación del sector más pobre y menos politizado para asegurar su apoyo y utilizarlo como voto secuestrado y fuerza de choque contra la oposición democrática.

Esta semana, en su resurrección, el exministro de Planificación y Finanzas Jorge Giordani denunció que entre 2004 y 2012 se habían entregado por parte de Cadivi $214.000 millones de los que reclama se informe nombres y cantidades. En el mismo sentido se manifestó el escritor Luis Brito García hasta ahora prominente personaje del chavismo. En cuanto a Giordani el debe saber quiénes son y quiénes obtuvieron esa boloña de billetes verdes, desembuche ex ministro. Suelte esa carga tan pesada. o la va a dejar como lápida para su tumba. El tiempo apremia.