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“Nos estamos quedando sin pediatras”

La cantidad de estudiantes de los postgrados de pediatría ha bajado

La cantidad de aspirantes al postgrado de pediatría ha disminuido en los últimos años, hecho que agrava aún más el déficit de pediatras y de todas las subespecialidades del área


Patricia Marcano

En 15 años la radiografía de los concursos a postgrados médicos cambió. Los más de 2.200 jóvenes aspirando a una especialidad y la posibilidad de que hasta 20 médicos se disputaran un cupo quedaron en los archivos.

“Antes hacíamos un concurso de selección, ahora prácticamente es de asignación”, lamenta el doctor José Ramón García, coordinador de la Comisión de Estudios de Postgrados de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela (UCV).

Esta sede, que ofrece la mayor cantidad de especialidades y cupos en el país, ha visto la caída de aspirantes desde el año 2002, cuando de inscribir a 2.093 médicos para las distintas disciplinas registraron, tres años después, 1.254 inscritos y llegaron a su punto más crítico en 2010. Ese año la demanda bajó a 65% y solo se postularon 720 médicos.

En los últimos cinco años el interés ha mejorado. Ahora el piso es de 1.100 aspirantes, cifra que aún es inferior a lo “normal” y que refleja una caída de 44% con respecto a 2002. García señala que el interés de emigrar con un título de especialista en mano pudiera ser la causa del leve aumento.

“Este año se inscribieron 1.165 médicos para el concurso. En Medicina Interna se postularon 73 jóvenes para unos 60 cupos. Parece estar bien, pero siempre hay un grupo que se inscribe, presenta el examen, son admitidos pero no comienzan el postgrado. En esos casos llamamos al suplente pero llega un momento en el que no tenemos a quien llamar. Antes teníamos cinco aspirantes por cada cupo de las especialidades y en Pediatría llegábamos a 20 aspirantes por cupo. Ya no es así”, comenta García.

[quote_right] En la Universidad del Zulia (LUZ), segunda sede con más opciones y cupos de postgrados clínicos, suelen quedar 20% de las plazas de Pediatría vacías[/quote_right]

La UCV ofrece 130 cursos de postgrado. Antes, de las cuatro especialidades “madre”, las más solicitadas eran Pediatría, Obstetricia y Ginecología, Cirugía General y Medicina Interna, en ese orden. Actualmente Cirugía ocupa el primer lugar y Pediatría el tercero.

Si se dividen las opciones en especialidades médicas y especialidades quirúrgicas, estas últimas son las más buscadas. Se trata de Cirugía General (192 aspirantes para 50 cupos disponibles), Anestesiología (80), Oftalmología (54), Otorrinolaringología (54), Cirugía Plástica (43 y solo siete cupos), Cirugía Oncológica (15).

Menos atractivas son Geriatría y Gerontología (un aspirante y seis cargos disponibles), Psiquiatría (12, cerca de 20 cupos), Infectología (cuatro), Medicina Crítica (dos, se ofertaban 20 cargos hace tres años), Medicina Oncológica (seis), Pediatría (94 y 110 cargos), Hematología (ocho, unos 12 cupos) y Neonatología (dos, entre 15 y 20 cupos).

Pero estas cifras pueden disminuir. Luis Gaslonde, coordinador de la comisión entre 2009 y 2014, explica que durante esos años vieron que 10% de los que se inscribían no asistían al examen y 10% de los que finalmente eran asignados no iniciaban al postgrado.

“Quizás concursaban en paralelo para otros países y por eso no se presentaban. En el caso de los recién graduados sabemos que se van a España, Estados Unidos, República Dominicana y Panamá. Mientras que los especialistas se están yendo a Colombia, Ecuador, Chile, Argentina, Panamá y Brasil”, informó Gaslonde.

Este año la prueba para los postgrados de medicina en la UCV se realizaría el 11 de julio, al igual que en todas las universidades que ofrecen especialidades (Zulia, Los Andes, Oriente, Carabobo, Centroccidental Lisandro Alvarado, Experimental Rómulo Gallegos y Experimental Francisco de Miranda). Pero la fecha coincidió con un llamado a paro en la UCV y por afectar la logística la comisión decidió posponerlo para octubre. No habrá nuevas inscripciones. Las clases inician en enero de 2016.

La cantidad de aspirantes a postgrados médicos ha bajado en los últimos 15 años
Desde 2003 la cantidad de aspirantes a los postgrados clínicos de medeicina en la UCV se ha reducido 44%

Pediatras escasos

Comenzar los postgrados con cargos vacíos en Pediatría, Neonatología, Medicina Crítica, Emergenciología y Psiquiatría es una tendencia nacional, señala Freddy Pachano, director nacional del Consejo de Directores de Postgrados de Medicina de Venezuela.

En el caso de la UCV, la que más preocupa a la comisión es Pediatría. “Cuando hacíamos el examen para ese curso teníamos que habilitar dos auditorios de la facultad porque teníamos cerca de 400 aspirantes para 80 cupos. Pero en 2008 recuerdo que los aspirantes entraron en un solo salón grande, con menos de 200 pupitres y estaban junto con los aspirantes a Medicina Interna”, comenta José Ramón García.

Datos de la Coordinación de Estudios de Postgrados de la UCV indican que la cantidad de inscritos en pediatría bajó de 271 médicos en 2003 a 30 en 2011. En los últimos tres años la cifra no supera los 100 alumnos, recuerda Luis Gaslonde. Este año hay 94 inscritos para la prueba.

En la Universidad del Zulia (LUZ), segunda sede con más opciones y cupos, suelen quedar 20% de las plazas de Pediatría vacías, indica Pachano, quien es también coordinador de los postgrados de medicina de LUZ.

[quote_center]»Nos estamos quedando sin pediatras y sin especialistas en medicina crítica pediátrica, , neonatología, hematología pediátrica y todas las subespecialidades de los niños que requieren una formación base de pediatría»[/quote_center]

“Este año se inscribieron 51 médicos y tengo 65 cupos. En septiembre hacemos el llamado a médicos extranjeros y ahí seguramente se ocupan las vacantes. En los últimos siete años he llenado los cupos de pediatría con extranjeros”, manifestó.

El presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría, Huníades Urbina, aclara que toda la vida han existido convenios entre universidades venezolanas y extranjeras para el estudio de postgrados en el país, así que los médicos de otras nacionalidades no están quitándoles el puesto a los venezolanos. Los concursos para extranjeros se hacen después de la convocatoria y selección de los venezolanos.

“La situación es preocupante. En el Hospital Central de San Cristóbal, el postgrado universitario de Pediatría tiene 15 cupos por año. Este 2015 se van a graduar 15 pediatras, todos colombianos. Táchira no tendrá pediatras recién graduados este año”, sentencia Urbina.

En el Hospital Universitario de Maracaibo, agrega, 80% de los cursantes son también colombianos. Aunque llenan un vacío por el déficit de médicos y de residentes en los hospitales, al terminar deben irse a sus países.

[quote_center]Los recién graduados se van a España, Estados Unidos, República Dominicana y Panamá[/quote_center]

“Por eso como Sociedad de Puericultura y Pediatría nos preocupa que haya poca demanda, porque si no se forman pediatras no habrá relevo. Nos estamos quedando sin pediatras y sin especialistas en medicina crítica pediátrica, infectología pediátrica, neonatología, hematología pediátrica y todas las subespecialidades de los niños que requieren una formación base de pediatría”, advierte Urbina, quien además es intensivista y dirigió el hospital J.M de Los Ríos durante dos períodos.

La ULA y sobre todo LUZ tienen gran cantidad de colombianos sus centros, por ser estados fronterizos, pero a Caracas también llegan.

En el Hospital General del Oeste (Magallanes de Catia), dependen de ellos. La directora del postgrado de Pediatría, María Elena Córdova, recuerda que durante dos años ese curso estuvo cerrado porque nadie se postuló; desde hace años son la última opción escogida entre todas las sedes para estudiar pediatría en la capital.

Las sedes de postgrados se quedan desiertas en varios hospitales
Durante dos años el hospital de los Magallanes de Catia se quedó sin estudiantes de pediatría

“En los últimos tres años hemos funcionado gracias al cupo de extranjeros. Tenemos seis colombianos ahorita y hay otros seis interesados. Vamos a esperar el llamado, queremos que vengan. Están bien formados y no hemos tenido problemas con ellos”, relató Córdova. De 30 cupos tienen cuatro vacíos. Este año egresan seis y en enero necesitarán 11.

Urbina detalla que a los colombianos les sale muy barato estudiar en Venezuela, sobre todo por la devaluación del bolívar, según les comentan los jóvenes. “Además, la preferencia por Venezuela indica que tenemos muy buen nivel en medicina”, dice. En la UCV han tenido nicaragüenses y bolivianos en Nefrología.

Pero no en todos los casos llenan las vacantes. “Neonatología, Medicina Crítica pediátrica y de adultos, Emergenciología pediátrica y de adultos y Psiquiatría no las lleno ni con extranjeros”, precisa el coordinador de LUZ.

Con la carencia de aspirantes y la obligatoriedad de “asignar” en lugar de “seleccionar” el problema está en la productividad y rentabilidad. Urbina explica que algunos de esos alumnos se quedan en el camino porque no pueden con la carga académica y al final se pierde ese cupo. “El estudiante no paga nada, pero la universidad sí hace una inversión en ellos y si renuncian eso se pierde”.

[quote_center]»El único postgrado de Anestesiología Pediátrica del país funcionaba en el J.M de Los Ríos pero cerró hace 3 años»[/quote_center]

Diversas causas

El hospital de niños J.M de Los Ríos no deja de ser referencia a pesar de la crisis. Hace cuatro años llegaron a graduar apenas cuatro pediatras pero poco a poco han mejorado: en 2014 se graduaron 17 y este año van por la misma cantidad.

Liliana Núñez, adjunto docente a la dirección del hospital, cuenta que igual tienen déficit de pediatras pues de 75 residentes que deberían tener hay 59. “Este año llenamos los 25 cupos pero renunciaron tres. 56% de nuestros estudiantes son del interior del país y se les hace muy difícil mantenerse en Caracas con el sueldo. Exponen razones económicas en sus cartas”.

La disminución les preocupa porque también se están quedando sin esos otros subespecialistas. La emergencia pediátrica del J.M tiene un solo médico adjunto.

El hospital de niños J.M de Los Ríos sigue siendo referencia
En el J.M de Los Ríos llegaron a graduarse solamente cuatro pediatras hace cuatro años; en 2014 egresaron 17. Pese a las carencias sigue siendo un centro de referencia. Foto: Cristian Hernández

El postgrado de Medicina del Adolescente tiene años desierto, faltan gastroenterólogos pediatras, oftalmólogos pediatras, oncólogos pediatras, hematólogos pediatras y nefrólogos pediatras. El único postgrado de Anestesiología Pediátrica del país funcionaba allí pero cerró hace 3 años, informó Huníades Urbina.

A su juicio, además de la migración de médicos venezolanos, los bajos sueldos siguen afectando. “Antes uno hacía la especialidad apenas se graduaba. Ahora creo que los muchachos prefieren trabajar 2 o 3 años en una clínica, donde ganan cuatro veces más que en un hospital, ahorran y luego aplican, porque no es fácil mantenerse con sus sueldos en un postgrado a dedicación exclusiva”.

También está el incremento de postgrados como cursos no universitarios y el hecho de que el examen se realice el mismo día en todas las universidades, explicó José Ramón García.

A todas se suma el deterioro de los hospitales, la escasez de medicamentos y la crisis generalizada del sector salud. Urbina asegura que lo que enseñan en la teoría no puede aplicarse en la práctica por la falta de insumos. “Estamos haciendo dos medicinas y eso tampoco ayuda”.


Los MIC hacen el intento

En enero del año pasado, 974 médicos integrales comunitarios (MIC) de un total de 6.285 egresados de la primera cohorte de dicho programa iniciaron postgrados clínicos. El resto fue inscrito en Medicina General Integral.

La mayoría cursa postgrados no universitarios (dependen del Ministerio de Salud, Ivss y Sanidad Militar), pocos optaron por los cursos de la Universidad de Los Andes (ULA), de la Universidad del Zulia (LUZ) y de la Universidad de Carabobo (UC).

Freddy Pachano, coordinador de Postgrados de Medicina de LUZ, informó que en los últimos dos años ha ingresado 23% de todos los MIC que concursan. 17 en total, pero quedan ocho.

“Me ha renunciado más de 50% porque no están bien preparados, la mayoría no da la talla, pero hay casos puntuales en los que sí. Hace dos años el mejor examen para Cirugía General lo hizo un MIC. Ya va para tercer año. El muchacho nos comentó que en medio de su formación se interesó por aprender más y entraba como oyente a las clases de medicina de la Universidad del Zulia, así se niveló”.

Los que pasaron el examen ingresaron a Medicina Familiar, Traumatología y Pediatría.

Huniades Urbina informó que al J.M de Los Ríos entraron tres MIC en 2014 y queda uno. “Ellos reconocen que no tienen la preparación necesaria y se van, les cuesta el doble”. El que sigue en el postgrado de Pediatría pidió un permiso temporal para formarse un poco más y al regresar comenzó de nuevo el primer año.

“Yo estoy de acuerdo con que la gente estudie, pero no con que los MIC entren directamente a una subespecialidad como hicieron en la Maternidad Concepción Palacios, que entraron directo a Neonatología. Ahí el resultado fue terrible”, manifestó Urbina.


Si quiere contactar al autor de este trabajo, escriba a patricia@larazon.net