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Caos creador

Cambian los actores en ambos lados del Atlántico norte, pero la política de conquista es la misma


Julián Rivas

Estos son tiempos en que Estados Unidos parece estar de cabeza. Muchos coinciden en que sus pretensiones hegemónicas chocan con la realidad.

Da la impresión de que solamente en América Latina los gringos tienen obsecuentes parciales, como la Mesa de Unidad Democrática, MUD, Temer y Macri.

Este viernes casualmente asistimos a una conferencia de la Universidad de Carabobo, en Valencia, en el marco de la Feria del Libro.

Ese centro de académico le hizo reconocimientos al embajador del Líbano en Venezuela, Elías Lebbos, y a la vez me invitaron a ofrecer mi visión sobre ese país árabe y del Medio Oriente.

En líneas generales se trató de un debate académico, muy respetuoso, que contó con la presencia de la rectora de la Universidad de Carabobo, Jessy Divo de Romero, y el secretario Pablo Aure, ambos de origen libanés, y una nutrida asistencia de venezolanos-libaneses residentes en Valencia.

El mundo ha cambiado. En apenas diez años se han esfumado los sueños de Estados Unidos y sus aliados regionales para construir un Líbano a su medida, y vemos que el interés de los libaneses por evitar conflictos armados y llevar la paz a su nación se ha impuesto.

Las amenazas se mantienen pero el Líbano ha sabido preservar su unidad en la diversidad.

Los neoconservadores estadounidenses instrumentaron la política del caos creador en el Medio Oriente. Eso no ha funcionado tal y como lo pretendió el establecimiento gringo, Israel y sus aliados regionales.

Ha habido guerras devastadoras en Libia, Irak y Siria, pero las pretensiones de Estados Unidos y sus aliados de aplicarla en el Líbano han chocado con la determinación de la dirigencia libanesa de evitar las confrontaciones fratricidas, resolver por sus propios medios las diferencias, y a la vez de garantizar mecanismos de defensa ante las permanentes amenazas externas.

Por lo demás, hablar sobre Líbano es revisar su historia, los puntos de encuentro del pueblo árabe con la vieja España, con América Latina y particularmente con Venezuela.

Rememorar los primeros movimientos migratorios de los libaneses en Venezuela desde del fines del siglo XIX, comienzos del XX, hasta la actualidad, y destacar la cultura compartida que abre nuevos horizontes con el paso del tiempo. Muy bien.

Pero, vamos con Venezuela. Debemos mirarnos en ese espejo. Hay que ver bien lo que significa cuando Estados Unidos dice que va a llevar democracia a otros pueblos, que terminan devastados, como Irak y Libia. O como Yugoslavia, fracturada por intereses de Washington.

La OTAN y la Unión Europea. Yugoslavia es aleccionadora, porque es la prueba de que el bienestar económico poco importa cuando se quiere reducir a una nación.

Los voceros gringos se empeñan en exigir revocatorio en Venezuela y desconocen el fraude de la MUD en el proceso de recolección de firmas para la consulta.

Nunca se imaginó el constituyente de 1999 que una idea con pretensiones democráticas iba a servir de excusas para la injerencia imperialista en Venezuela.

Es más, cualquier conservador dirá en privado que los referendos son actos populistas. No creen en eso, pero aquí son una excusa. Ni en España, ni Paraguay, ni con Temer o Macri, hay interés de hacer referendos sobre políticas públicas.

Supongamos que la MUD llega a gobierno, Dios nos salve. ¿Creen ustedes que van a querer hacer referendos?. Jamás. O en México, un país que necesita más de un referéndum.

Recuerdo a un funcionario centroamericano: la mejor oportunidad para adecentar, democratizar y transformar México se dio con Cuauhtémoc Cárdenas, y fue bloqueada por Estados Unidos y el corrupto liderazgo mexicano del PRI y del PAN. La hecatombe.

La tragedia mexicana es tan grande que algunos van a las raíces coloniales, como lo escribió José Vasconcelos. Él dice que Carlos III tuvo mucha culpa de la expansión imperialista gringa, al tomar decisiones administrativas desacertadas en la Nueva España (hoy México) y otros puntos del inmenso territorio americano gobernado desde Madrid.

Vasconcelos lo advierte a partir del paso del tiempo, a inicios del siglo XX. La mejor lección que podemos extraer es que los anglosajones siempre han estado en lo suyo, aparentando lo que no son para engañar y lograr sus objetivos de dominación.

Y uno ve las cosas hoy y debe pelar los ojos. Por ejemplo, eso de la intervención humanitaria se parece tanto a la invocación de la defensa de los naturales en América, y la defensa de la libertad recuerda la campaña contra la inquisición. En cuatro siglos algo ha cambiado.

Los mecanismos tecnológicos se han perfeccionado, las agencias de noticias, la reacción inmediata del vocero del Departamento de estado. Pero Londres y Washington tienen el mismo libreto.

La primera invasión inglesa en tierras americanas se vendió como unan respuesta bélica contra España y a la vez como un poblamiento anglo que llenaría de libertades a los nativos. Esto se nutrió de las informaciones del libro “New Survey of West Indies”, de Tomas Gage, nos recuerda Vasconcelos.

Los viajes de Robert D. Kaplan, o las supuestamente lucidas argumentaciones de Samuel P. Huntington, sirven para las guerras de hoy día.

Cambian los actores en ambos lados del Atlántico norte, pero la política de conquista es la misma. Jefe de los piratas fue la reina Isabel. John MacCain se reúne con los armados “moderados” de Siria. Entonces, cuéntame una de vaqueros.

Estos días vi a un peruano. Me dijo que Lima está bonita y hay muchos carros nuevos. Le dije que el transporte público es lo que debe destacarse.

Todo nació de una crítica a ese pueblo que tanto le gusta dejarse gobernar por extranjeros. Los gringos-israelíes son sus favoritos. Increíble.

Y el asunto da para la conjetura porque vemos que en Venevisión los noticieros dicen que el señor Capriles es el líder de la unidad nacional.

Pregunto: ¿esto será idea del señor Cisneros o de algún gerente informativo? Es curioso cómo se articulan las opiniones en Venezuela.

Ahora nos están dando un baño de sacerdotes, curas, cardenales, todos opinando de los humano y lo divino. Las libertades y el proyecto de vida. Es que el referendo puede servir para el caos creador.

Para cerrar, daré cuenta de lo que dijo Ramón Guillermo Aveledo, jefe de la MUD en 2015, sobre cómo rebanar la Fuerza Armada si la oposición llega al gobierno.

Agregaré la dirección porque una periodista opositora quiere pruebas. Ahí les va:

https://mundo.sputniknews.com/americalatina/201512021054339584-vemezuela-armamento/

Lea algo de lo que dice Aveledo y diga si el caos creador no es una trampa caza bobos: Para Aveledo, el armamento que debe tener Caracas es el que requiere para sus necesidades, para cuidar las fronteras, “que son extensas (…), del narcotráfico, del contrabando, de los grupos irregulares que secuestran y extorsionan en territorio venezolano (…) la minería ilegal, eso requiere un tipo de armamento, un tipo de equipamiento propio de esas amenazas. Eso no son aviones de alta velocidad, o baterías antiaéreas que parten de supuestos de conflicto, de guerra convencional, que no son los supuestos que Venezuela necesita”, recalcó.

Perfect, of course, celebran a Aveledo y Capriles en Washington y al otro lado del Atlántico. Esa es la MUD necolonial. Bravo por Venevisión. Que siga la telenovela mexicana.